La vida posible de un artista




Habitar la paradoja de ser únicos e irremplazables y a la vez absolutamente prescindibles. Esta unicidad del ser humano Boltanski las traduce en la relación de número e individuo, la cantidad, la acumulación, son sus recursos y a la vez concepto de su obra.

Boltanski trabaja con fotografías, retratos, ropa, elementos que recuerdan la presencia de alguien; “la fotografía de un desconocido, un nombre o un vestido es siempre la idea de la presencia/ausencia. Hay alguien o hubo alguien. El hecho de mostrar la presencia significa también la ausencia de esa persona”( p. 166)
Con estos elementos construye instalaciones, que en los últimos años han tomado cuerpo como instalaciones que dialogan directamente con el espacio intervenido, la obra es la misma pero cambia siempre que se vuelve a montar. La iluminación es clave en las obras de Boltanski.La ficción- el relato- lo verdadero- lo falso, recorren su obra y vida, su contar sobre ellas. Tanto como construye un(os) relato(s) sobre su obra va construyendo una posible narración de su vida, deja que se vayan borrando los límites de realidad y ficción, generando una realidad, la relatada, un poco por protegerse otro poco porque ¡¿qué importa si es verdadero o falso?! Son narraciones que nos interrogan, sobre la muerte, la visa, la memoria, los recuerdos. Sobre el ser (humano).
Una autobiografía, realizada a través de un encuentro
semanal durante un año con Catherine Grenier (curadora de nuevos espacios de exposición en el Centro Pompidou) Un poco como confesión un poco como psicoanálisis quizás.
Editada por Ediciones de la Flor, dentro de su Colección personas, nos entregan C. Boltanski y C. Grenier este recorrido por la vida y obra de Boltanski, (quizás verdadera quizás falsa, o un poco de las dos) para el disfrute absoluto del lector.

El comienzo de la entrevista nos relata escenas, hitos de su vida familiar que pueden o no ser razones de lo que es hoy Christian Boltanski artista. Es una posibilidad, una de las vidas posibles.







Christian Boltanski. La vida posible de un artista.
Christian Boltanski-Catherine Grenier.
Editorial De la Flor
PVP: $82

Consagrar la transparencia de la noche

La poesía de Daniel Cristaldo

La poesía casi todas las veces emplea modos y maneras que solo ella comprende linealmente en su aura de belleza.

Es posible, que el lector ajeno a este género olvidado, solo interprete una aglomeración de palabras asonantes y disonantes que en determinados momentos carecen de un sentido lineal. El lector de poemas, podría identificarse más bien con aquél macho recluido en el hondo sillón, que logra mimetizar la Orquesta que se sucede en la Hoja con aquella otra Orquesta magna de la Vida. Un sentido no lineal requiere de comprensiones no lineales; la mezcla del sentir con el pensar y así mismo, el pensar con el sentir. Dejar descansar la necesidad del consumo, del producto cerrado y empaquetado de comprensiones aceptables por convencionalismo, y aprender a arriesgarse, a conmoverse con aquello que aparentemente denota “delirio”. No hay delirio en lo desconocido, hay justamente, desconocimiento. En lo personal, siento que el delirio se manifiesta exclusivamente en aquella “cosa” empaquetada, en la repetitiva frecuentación a esa “cosa” empaquetada, cerrada, encapsulada dentro de los parámetros aceptables de la sociedad.

La belleza poemática de Daniel Cristaldo, poeta montevideano nacido en el año 1960; emplea formas de poetizar que arriesgan las palabras a su máximo nivel de expresión. Pequeñas gemas-palabra que ruedan alrededor de la oscuridad sin vacilaciones. El acto heroico se vuelca una y otra vez puesto que ensancha los conceptos predefinidos de la belleza, hasta el lugar remoto de la blandura de una mano, de una hoja, de una hormiga histérica tras el comienzo de las lluvias.

El autor de Las habitaciones despiertas (Estuario editora, 2008 - Montevideo) elabora en su Consagrar la trasparencia de la noche una red de palabras que derivan en nuevos conceptos, nuevas maneras de poetizar, nuevas conclusiones inconclusas acerca de la belleza. Propone una poesía novedosa para aquellos poetas consumidos en tanto cemento bonaerense y montevideano. No todo debe quedar pequeño ante las magnas obras de la literatura universal, donde nuevamente el convencionalismo prefigura el mapa y los puntos a seguir… ¿Qué es eso? Sino la idiotez. Aun los héroes subsisten en la destreza e inteligencia de cada ser vivo.

EL SUSURRO :

un caracol marino ha tirado las redes

a la construcción del mundo

con tan sólo escucharlo sentirás

la rotación de las tareas invisibles en el pecho.

El cielo baja siempre con vuelo de abeja caliente

para examinar las huellas hechas desde el amanecer.

Las sirenas cantan a toda hora ,recogen las manos que se olvidan

y las ríen laberintos hasta nuestra disolución .

Quédate cerca del amor que sangra de tantos ríos .

En ellos estará el verbo que acontece niño y niña

sobre tu carne ,espera y busca el aliento

aún cuando esté segmentado como quebrados pétalos dentro de los huecos .

Consagrar la transparencia de la noche,
Daniel Cristaldo,
colección de poesía, 1
Melón editora
978-987-27313-0-4
PVP: $40 (al 26/12/11)

Felices fiestas


¡Felices fiestas!
Gracias a todos por haber compartido este año con nosotros.





Galería Editorial


Llegaron a la Librería los libros de Galería Editorial "Tan largas pestagnas" y "La dura vida".
¡Chistosos en serio! ideales para regalar en este fin de año.

Tarjetas para regalar

Para estas fiestas una buena opción para regalar son las tarjetas de puntos de Libros del Pasaje.
Es fácil: se cargan puntos en la tarjeta, el nombre de la persona y después la pueden utilizar en cualquier compra de libros sin límite de tiempo.

Presentación de "Vos por que no tenés hijos"

Libros del Pasaje y editorial Sudamericana los invita a la presentación del libro" Vos por que no tenés hijos" de Osvaldo Bazán.

El día miércoles 7 de diciembre 19hs. Presentan: Ernestina País, Josefina Licitra y el autor.

Thames 1762. Entrada libre y gratuita.

¿Es posible hablar de amor sin hablar de ausencia? En esta novela, Osvaldo Bazán busca —sin hacerla evidente— una respuesta a esta pregunta infinita. Y el resultado es una historia maliciosa, ágil y profundamente sensible que logra dar voz —dar relato— a una generación montada sobre el desencanto. Los mandatos familiares, los silencios históricos, la promesa de infelicidad y la libertad como un pasaje que se paga caro dejan su marca, gracias a la prosa honesta y rápida de Osvaldo, en los días y las noches de Alejandro Marino: un conocedor serial de varones que busca, como casi todos nosotros, un norte. Un viaje al corazón de las cosas buenas. Aunque “bueno” sea, para cada cual, algo distinto. Y aunque el corazón quede en el lugar menos pensado.




Osvaldo Bazán nació en el 63 y hasta 1982 vivió en Salto Grande (Santa Fe). Estudió periodismo en la Universidad de La Plata. Desde 1984 hasta 1995 trabajó como periodista en Rosario en radio, televisión y gráfica. En 1996 se radicó en Buenos Aires, donde trabajó para los diarios Página/12 y Perfil. Fue redactor de las revistas Noticias, Espectador yVeintitrés. Condujo los programas Se fueron todos y Tenemos que hablar, en el canal de noticias TN. Durante las cuatro temporadas que estuvo en el aire, fue columnista del programaMañanas informales, con Jorge Guinzburg y Ernestina Pais. Publicó tres novelas: …y un día Nico se fue (2000), La más maravillosa música (una historia de amor peronista) (2002) yLa canción de los peces que le ladran a la luna (2006). Y en 2005 publicó Historia de la homosexualidad en la Argentina. De la Conquista de América al siglo XXI. Fue prosecretario de cultura y espectáculos en el diario Crítica de la Argentina, y por estos días comparte Un día perfecto con Ernestina Pais, Santiago Scheffer y Martín Reich por FM Metro, 95.1, de lunes a viernes de 7 a 10, y conduce Agenda Nacional por TN.



Cris Schiavone en Gallery Nights Palermo Viejo

Los invitamos a la exposición de Cris Schiavone en la última edición de Gallery Nights 2011 - Palermo Viejo.
La artista presenta su serie "La impermanencia de la forma".
Martes 6 de diciembre de 19 a 22 hs
Calumbe en vivo a las 20 hs
Thames 1762. Entrada libre y gratuita.

La impermanencia de la forma nos lleva indefectiblemente al transcurrir del tiempo, condición necesaria para que la forma sea impermanente. Retrotrae al inquietante poema de Borges en el que se refiere a Heráclito, el filósofo del devenir, cuando éste se enfrentó al “espejo fugitivo” del río que fluía y sintió “con el asombro de un horror sagrado que él también” era un río y una fuga. El río devenía, su forma devenía, pero el filósofo también devenía. Esto le causó horror. Ese horror era sagrado. Era una cuestión relativa: ¿cuál de las formas era más impermanente? En el caso de la serie de Schiavone, bien podrían los cuadros mirarnos y, al ver nuestro devenir, asombrarse de la impermanencia de la forma. Son también efímeros, pero seguramente nos trasciendan. Es una cuestión topológica, una cuestión de relaciones en la cual los observadores somos observados por entes que cumplen la función de mojones que “ubican” nuestra identidad.
Hay un sutil artificio en esta serie: la nobleza de sus materiales, la paleta baja, discreta y disimulada, crean un simulacro que conforma el armazón de lo-que-es alrededor nuestro, de lo que en su aparente trascendentalidad nos da elementos de fijeza, puntos de referencia, que nos permiten, desde la experiencia estética, sobrellevar el torbellino de la vida y la angustia de la finitud. El simulacro: si los cuadros son, nosotros también somos. Ficción de estabilidad. Es la estética, en su función de hacernos salir de nosotros, de nuestro estado de percepción cotidiana, la que cumple este doble juego de hacer emerger nuestra angustia existencial y, paradójicamente darnos tranquilidad y deleitarnos. Schiavone artista cumple una función sacerdotal en la conjura que establece con su oxímoron: «la impermanencia de la forma» se opone a la forma expuesta en los cuadros, a la «permanencia de la forma», a los trazos de carbonilla y tiza secos, largos, cortos, blancos, gama de grises….forma. La inquietante coexistencia de los opuestos.
En esta línea de pensamiento, se puede sospechar de esa cierta ingenuidad que presenta Schiavone en el discurso. Es posible que su mensaje la trascienda. Cuando le fuera preguntado el por qué del hardboard usado como soporte, respondió con frescura: “¡es lo que tengo!”. Bien podría haber respondido: “¡por el simple devenir, por la impermanencia de la forma!” Quizá tuvo la delicadeza de no querer turbarnos con su respuesta.
Paralelamente, en este juego de contradicciones, de artificios y de simulacros, bien sabe Schiavone que en su conexión con los observadores a través de la obra, está simultáneamente exponiendo la otra cara del devenir, el nacimiento de la experiencia de reflexión que nos invita a hacernos cargo de nuestro ser-en-el-mundo. «La impermanencia de la forma», un sutil mensaje de una profunda artista.
Alejandro Fidias Fabri

Noche de librerías con Remolino, Iamique y Arte a babor